Si estás pensando que voy por algún
ángulo de comida por eso del Yomi, será mejor que busques un
recetario, pero si lo que quieres es conocer un poco más de la mente y el mundo de los gamers, estás
en el lugar correcto.
En japonés, Yomi (pronunciado
iomi) es el equivalente a infierno (con sus diferencias culturales,
obviamente), un lugar donde personas que han ganado su sitio ahí, sufrirían por toda la eternidad. En el mundo del
gaming, si no tienes Yomi, estás destinado a sufrir.
Para los jugadores profesionales
de juegos de tarjetas coleccionables, videojuegos y muchos otros,
incluyendo deportistas, Yomi es algo totalmente diferente y
está más relacionado con conocer la mente de tu oponente para
llevarlo a la derrota.
Yomi
es conocer el siguiente
movimiento de tus adversarios, lo cual puede llegar a sonar bastante
sencillo, pero ¿qué pasa cuando eres tú quien hace el
primer movimiento? Es aquí donde entran los diferentes niveles de
Yomi.
El nivel cero es la base del juego,
donde nadie ha actuado, todos los jugadores tienen la
misma base, herramientas y situación. En el momento que alguien inicia
una acción que pueda tener respuesta de alguien más, entramos en el primer nivel donde se contraataca, este es un nivel básico, ya sea en Age of Empires
al contestar un ataque de caballos con piqueros, zerglings
con firebats en StarCraft ( tal vez ese ejemplo no sea
el adecuado), agarres en contra de bloqueos en juegos de peleas o
granadas de humo contra francotiradores en diversos shooters.
Tomemos a los
francotiradores para ejemplificar los niveles:
Jugador A conoce los hábitos de su
rival que suele atravesar un lote baldío, así que corre y toma el
rifle (Yomi nivel uno); jugador B está a más de 50 metros de
distancia, su única cobertura son los restos de un automóvil entre
él y la mira del cazador que se dispone a meter un proyectil en su
cuerpo, sabe que corre peligro, tira una granada de
humo para bloquear la visibilidad, poder emprender la carrera y
ponerse a salvo (Yomi nivel dos); el jugador A observa la situación y
arroja una granada de fragmentación en el centro del humo (Yomi
nivel tres); B escucha el metal tocar el suelo y da un salto para
alejarse del peligro, la nube empieza a desvanecerse, así que
nuestro corredor trata de recordar la ubicación del sniper y
pide a su santo favorito que guíe sus proyectiles en la dirección
correcta para un headshot (Yomi nivel cuatro). Si
aciertan o fallan es una cuestión diferente y lo dejaremos para que
pongas el final que más te guste.
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