Gracias a que a la mayoria le gusto esta clases de cuentos o reflexiones les dejo la parte 2 que ya salio
Cuento 1-Sábanas.
Cuento 2-Soy Ciego.
Cuento 3-Depende la Forma.
Cuento 4-Lo que es Divertido en el Hombre.
Cuento 5-1000 Perritos.
Cuento 6-La Rosa y el Sapo.
Cuento 7-Las Estrellas de Mar.
Cuento 8-La Familia.
Cuento 9-Tierra.
Cuento 10-La Piedra.
Cuento 11-Quiero ser como Tú.
Cuento 12-Transformación.
Cuento 13-$2.37
Cuento 14 -Instito Animal.
Cuento 15-Aquel Saco de Plumas.
Cuento 16-Elecciones.
Cuento 17-En busca de la Pareja Perfecta.
Cuento 18-Las 4 Velas.
Cuento 19-Bailar bajo la Lluvia.
Cuento 20- Pinturas.
Cuento 21-Una mañana extraordinaria.
Cuento 22- Somos lo que Somos.
Cuento 23-Minutos de Sabiduría.
Cuento 24-Excusas.
Cuento 25-Prueba de Valor.
Sabanas
Una pareja de recién casados, se mudó para un barrio muy tranquilo.
En la primera mañana en la casa, mientras tomaba café, la mujer reparó a través de la ventana que una vecina colgaba sábanas en el tendal.
-¡Qué sábanas sucias está colgando para secar!
-Está precisando de un jabón nuevo... ¡Si yo tuviera confianza con ella le preguntaría si quiere que yo le enseñe a lavar las ropas!-
El marido miró y quedó callado.
Algunos días después, nuevamente, durante el desayuno, la vecina colgaba sábanas y la mujer comentó con el marido:
-¡Nuestra vecina continúa colgando las sábanas sucias! ¡Si tuviera confianzacon ella le preguntaría si quiere que yo le enseñe a lavar las ropas!-
Y así, cada dos o tres días, la mujer repetía su discurso, mientras la vecina tendía sus ropasl.
Había pasado un mes, la mujer se sorprendió al ver las sábanas siendo tendidas, y entusiasmada fue a decir al marido.
-¡Mira, ella aprendió a lavar las ropas! ¿Será que la otra vecina le enseñó...? Porque yo no hice nada.-
El marido calmosamente respondió:
-¡No, hoy yo me levanté más temprano y lavé los vidrios de nuestra ventana! -
Y así es. Todo depende de la ventana, a través de la cual observamos los hechos. Antes de criticar, verifiquemos si hicimos alguna cosa para contribuir. Aprendamos a ver nuestros propios defectos y limitaciones.
Soy ciego...
Dicen que una vez, había un ciego sentado en la vereda, con una gorra a sus pies y un pedazo de madera que, escrito con tiza blanca, decía: POR FAVOR AYÚDEME, SOY CIEGO.
Un creativo de publicidad que pasaba frente a el, se detuvo y observó unas pocas monedas en la gorra. Sin pedirle permiso tomo el cartel, lo dio vuelta, tomo una tiza y escribió otro anuncio.
Volvió a poner el pedazo de madera sobre los pies del ciego y se fue.
Por la tarde el creativo volvió a pasar frente al ciego que pedía limosna, su gorra estaba llena de billetes y monedas. El ciego reconoció sus pasos y le preguntó si había sido él el que rescribió su cartel y sobre todo... ¿qué había puesto?.
El publicista le contestó: "Nada que no sea tan cierto como tu anuncio, pero con otras palabras", sonrió y siguió su camino.
El ciego nunca lo supo, pero su nuevo cartel decía: HOY ES PRIMAVERA... Y NO PUEDO VERLA.
¡Cambiemos de estrategia cuando no nos sale algo, y veremos que de esa manera puede que resulte!
Depende de la forma
Un Sultán soñó que había perdido todos los dientes.
Después de despertar, mandó llamar a un Sabio para que interpretase su sueño.
¡Qué desgracia Mi Señor!, exclamó el Sabio, Cada diente caído representa la muerte de un pariente suyo.
¡Qué insolencia!, gritó el Sultán enfurecido, ¿Cómo te atreves a decirme semejante cosa? ¡Fuera de aquí!
Llamó a su guardia y ordenó que le dieran cien latigazos.
Más tarde ordenó que le trajesen a otro Sabio y le contó lo que había soñado.
Este, después de escuchar al Sultán con atención, le dijo:
¡Excelente Señor! Gran felicidad te fue reservada. El sueño significa que vivira mas que todos sus parientes.
Se iluminó el semblante del Sultán con una gran sonrisa y ordenó que le dieran cien monedas de oro.
Cuando éste salía del Palacio, uno de los cortesanos le dijo admirado:
¡No es posible! La interpretación que hiciste de los sueños es la misma que el primer Sabio. No entiendo porque al primero le pagó con cien latigazos y a ti con cien monedas de oro.
Recuerda bien amigo mío, respondió el segundo Sabio, que todo depende de la forma en el decir..uno de los grandes desafíos de la humanidad es aprender a comunicarse.
Lo que es divertido en el hombre
Un discípulo preguntó a su maestro:
- Quiero saber que es lo más divertido de los seres humanos
el Maestro comentó:
"Piensan siempre al contrario: tienen prisa por crecer, y después suspiran por la infancia perdida. Pierden la salud para tener dinero y después pierden el dinero para tener salud.
Piensan tan ansiosamente en el futuro que descuidan el presente, y así, no viven ni el presente ni el futuro.
Viven como si no fueran a morir nunca y mueren como si no hubiesen vivido.
1000 perritos
" Se dice por ahí que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada. Cierto día, un perrito buscando refugio del sol logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa, el perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera; al terminar de subir las escaleras se topó con una puerta semi-abierta.
Lentamente se adentró en el cuarto y para su sorpresa se dio cuenta que dentro de ese cuarto había 1000 perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos. El perrito de nuestra historia comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco, los 1000 perritos hicieron lo mismo; posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos, el perrito se quedó sorprendido al ver que los 1000 perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él. Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para si mismo:
"Qué lugar tan agradable, voy a venir más seguido a visitarlo".
Tiempo después, otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró en el mismo cuarto, pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros 1000 perritos del cuarto se sintió amenazado ya que, a su parecer, lo estaban viendo de una manera agresiva, éste empezó a gruñir y obviamente vio como los 1000 perritos le gruñían a él. Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros 1000 perritos le ladraron también a él; cuando este perrito salió del cuarto pensó:
"Qué lugar tan horrible es este, nunca mas volveré a entrar allí".
En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía:
"La casa de los 1000 espejos".
Hay veces que el mundo nos devuelve lo que damos, si decidis encarar las cosas con una sonrisa es probable que te devuelvan una sonrisa, si en cambio das tu peor cara seguramente, vas a ver lo mismo.
La rosa y el sapo
Había una vez una rosa roja muy hermosa y bella. Se sentía de maravilla al saber que era la rosa mas bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que la gente la veía de lejos. Un dia se dió cuenta de que al lado de ella siempre había un sapo grande y oscuro y que era por eso que nadie se acercaba a verla de cerca. Indignada ante lo descubierto le ordenó al sapo que se fuera de inmediato; el sapo muy obediente dijo:
-"Esta bien, si así lo quieres..."
Poco tiempo despues el sapo pasó por donde estaba la rosa y se sorprendió al ver la rosa totalmente marchita, sin hojas y sin petalos. Le dijo entonces:
-"Vaya que te ves muy mal. -¿Qué te pasó?"
La rosa contestó
-"Es que desde que te fuiste las hormigas me han comido día a día, y nunca pude volver a ser igual."
El sapo solo contesto
-"Claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre eras la mas bella del jardín".
Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos mas que ellos, mas bellos, mejores, simplemente que no nos "sirven" para nada. Nadie sobran en este mundo, todos tenemos algo especial, que hacer, algo que aprender de los demas o algo que enseñar, y nadie debe despreciar a nadie. No vaya a ser que esa persona nos haga un bien del cual ni siquiera estemos conscientes.
Las estrellas de mar
Había una vez... un escritor que vivía en una tranquila playa, cerca de una colonia de pescadores.
Todas las mañanas iba a caminar por la orilla del mar para inspirarse y las tardes las concurría en su casa escribiendo.
Cierto día, mientras caminaba por la playa, vio una sombra que parecía bailar. Al acercarse a esa figura, se dio cuenta que se trataba de un joven que recogía estrellas de mar que estaban en la arena para tirarlas nuevamente al mar.
- ¿Por qué está haciendo esto? - preguntó el escritor.
- ¿Usted no ve? - explicó el joven - La marea está baja y el sol está brillando. Ellas se secarán y morirán si permanecen aquí, en la arena.
El escritor se quedó paralizado por lo que había dicho el joven, y él le dijo:
- Joven, existen millones de kilómetros de playa en este mundo y centenas de millones de estrellas de mar desparramadas por las playas. ¿Qué diferencia hay? Vos tiras sólo unas pocas estrellas al océano y la mayoría muere. ¿Qué diferencia hay?
- Para esa estrella, si hice una diferencia...
Aquella noche el escritor no pudo escribir, ni siquiera dormir. Por la mañana del siguiente día volvió a la orilla, buscó al joven y se unió a él, juntos comenzaron a arrojar las estrellas de mar al océano.
AHORA SON DOS LOS QUE QUIEREN HACER UN LUGAR MEJOR: ESA ES LA DIFERENCIA.
La Familia
Tropecé con un extraño que pasaba y le dije perdón.
Él contestó discúlpeme por favor; no la vi...
Fuimos muy educados, seguimos nuestro camino, nos despedimos.
Más tarde, al estar cocinando, estaba mi hijo muy cerca de mí. Al darme vuelta casi lo golpeo, "¡Cuidado!" le grité; él se retiró dolido, sin que yo notara lo duro que le hablé.
Estando todavía despierta al acostarme, una voz me dijo suavemente: "Trataste al extraño cortesmente. Pero gritaste del niño que amas.
Ve a la cocina y encontrarás unas flores en el piso, cerca de la puerta.
Son las flores que cortó y te trajo, rosa, amarilla y azul. Estaba calladito para darte la sorpresa y no viste las lágrimas que llenaron sus ojos."
Me sentí miserable y empecé a llorar.
Suavemente me acerqué, me arrodillé junto a su cama y le dije:
"Despierta, pequeño, despierta... ¿Son éstas las flores que cortaste para mí?"
Él sonrió y dijo: "Las encontré junto al árbol. Las tomé porque son bonitas como tú, en especial la azul."
"Hijo, siento mucho lo que hice, no te debí gritar"...
Él contestó, "Esta bien mami, yo te quiero de todos modos."
"Yo también te quiero, y me gustan las flores, especialmente la azul".
Esto me paso a mi y seguro les paso a ustedes alguna vez, pero tenemos que aprender que a los que mejores tenemos que tratar son a los que de verdad queremos. Tene en cuenta que si morimos mañana, en unos días la empresa donde trabajamos cubre el puesto. Pero la familia que dejamos, sentirá la pérdida por el resto de su vida.
Tierra
Un campesino, que luchaba contra muchas dificultades, poseía algunos caballos para que lo ayudasen en los trabajos de su pequeña hacienda.
Un día, su capataz le trajo la noticia de que uno de los caballos había caído en un viejo pozo abandonado. El pozo era muy profundo y sería extremadamente difícil sacar el caballo de allí.
El campesino fue rápidamente hasta el lugar del accidente, y evaluó la situación, asegurándose que el animal no se había lastimado.
Pero, por la dificultad y el alto precio para sacarlo del fondo del pozo, creyó que no valía la pena invertir en la operación de rescate. Tomó, entonces, la difícil decisión: Determinó que el capataz sacrificase al animal tirando tierra en el pozo hasta enterrarlo, allí mismo.
Y así se hizo.
Los empleados, comandados por el capataz, comenzaron a lanzar tierra adentro del pozo de forma de cubrir al caballo. Pero, a medida que la tierra caía en el animal este la sacudía y se iba acumulando en el fondo, posibilitando al caballo ir subiendo.
Los hombres se dieron cuenta que el caballo no se dejaba enterrar, sino que, al contrario, estaba subiendo hasta que finalmente...
¡CONSIGUIÓ SALIR!
Si estás 'allá abajo', sintiéndote poco valorado, y los otros lanzan sobre vos la tierra de la incomprensión, la falta de oportunidad y de apoyo, recorda el caballo de esta historia. No aceptes la tierra que tiraron encima tuyo, sacsacudila y subi sobre ella.
La piedra
El distraído tropezó con ella.
El violento la utilizó como proyectil.
El emprendedor, construyó con ella.
El campesino, cansado, la utilizó de asiento.
Para los niños, fue un juguete.
Drummond la poetizó.
David, mató a Goliat.
Y Miguel Angel le sacó la más bella escultura.
En todos estos casos, la diferencia no estuvo en la piedra ¡sino en el hombre!.
No existe "piedra" en tu camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento.
Quiero ser como Tú
Mi hijo nació hace poco días, llegó a este mundo de una manera normal... Pero yo tenía que viajar, tenía tantos compromisos...!
Mi hijo aprendió a comer cuando menos lo esperaba, comenzó a hablar cuando yo no estaba...
¡¡¡Cómo creció mi hijo de rápido... cómo pasa el tiempo!!!
Mi hijo, a medida que crecía, me decía: -Papi, algún día seré como tú... ¿Cuándo regresas a casa, Papi?...-
- No lo sé hijo, pero cuando regrese jugaremos juntos... ya lo verás...-
Mi hijo cumplió 10 años hace poco días y me dijo... -¡Gracias papi por la pelota! ¿Quieres jugar conmigo?...-
-Hoy no hijito... tengo mucho que hacer...-
-Está bien papi, otro día será... te quiero mucho papi...- Se fue sonriendo, siempre en sus labios tenía la frase "YO QUIERO SER COMO TÚ, PAPI"...
-¿Cuándo regresas a casa Papi?... No lo sé hijo, pero cuando regrese jugaremos juntos... ya lo verás...-
Mi hijo ingresó a la universidad el otro día, todo un hombre....
-¡Hijito estoy orgulloso de ti, siéntate y hablemos un poco de ti...
-Hoy no Papi, tengo compromisos, por favor dame algo de dinero para visitar algunos amigos-
Ya me jubilé y mi hijo vive en otro lugar.. Hoy lo llamé, y... -¡Hola hijo, me gustaría verte!-...
-Me encantaría Padre, pero es que no tengo tiempo... tú sabes, mi trabajo, los niños... Pero gracias por llamarme, fue hermoso oír tu voz"...
Al colgar el teléfono me di cuenta que mi hijo... "ERA COMO YO".
Transformación
Un maestro de Detroit le pidió a Stevie Morris que lo ayudara a encontrar un ratoncito que se había escapado en el aula de clases.
El maestro apreciaba el hecho de que la naturaleza había dado a Stevie algo que ningún otro alumno tenía. La naturaleza le había dado a Stevie un notable par de oídos, para compensar la ceguera de sus ojos.
Pero ésta fué la primera ocasión en que Stevie sintió que se apreciaba la fineza de su oído.
Ahora, años después, dice que ese acto de 'aparente' desprecio por su condición de no vidente, fué el comienzo de una nueva vida.
Desde aquel entonces desarrolló su don del oído, hasta volverse, bajo el nombre artístico de Stevie Wonder, en uno de los grandes músicos populares de todos los tiempos.
Esta hstoria nos muestra como podemos ayudar a transformar la vida de una persona... y cómo ésa persona puede elegir cambiarse a sí misma
$2.37
El dueño de una tienda estaba colocando un anuncio en la puerta que leía: "Cachorritos en venta". Esa clase de anuncios siempre atraen a los niños, y pronto un niñito apareció en la tienda preguntando: "¿Cuál es el precio de los perritos?" El dueño contestó: "Entre $30 y $50". El niñito metió la mano en su bolsillo y sacó unas monedas: "Sólo tengo $2.37... ¿puedo verlos?". El hombre sonrió y silbó. De la trastienda salió su perra corriendo seguida por cinco perritos. Uno de los perritos estaba quedándose considerablemente atrás.
El niñito inmediatamente señaló al perrito rezagado que cojeaba. "¿Qué le pasa a ése perrito?", preguntó. El hombre le explicó que cuando el perrito nació, el veterinario le dijo que tenía una cadera defectuosa y que cojearía por el resto de su vida. El niñito se emocionó mucho y exclamó: "¡Ese es el perrito que yo quiero comprar!". Y el hombre replicó: "No, tú no vas a comprar ese cachorro, si tú realmente lo quieres, yo te lo regalo". Y el niñito se disgustó, y mirando directo a los ojos del hombre le dijo: "Yo no quiero que usted me lo regale. El vale tanto como los otros perritos y yo le pagaré el precio completo. De hecho, le voy a dar mis $2.37 ahora y 50 centavos cada mes hasta que lo haya pagado completo". El hombre contestó: "Tú en verdad no querrás comprar ese perrito, hijo. El nunca será capaz de correr, saltar y jugar como los otros perritos".
El niñito se agachó y se levantó la pierna de su pantalón para mostrar su pierna izquierda, cruelmente retorcida e inutilizada, soportada por un gran aparato de metal. Miró de nuevo al hombre y le dijo: "Bueno, yo no puedo correr muy bien tampoco, y el perrito necesitará a alguien que lo entienda". El hombre estaba ahora mordiéndose el labio, y sus ojos se llenaron de lágrimas... sonrió y dijo: "Hijo, sólo espero y rezo para que cada uno de estos cachorritos tenga un dueño como tú".
En la vida no importa quién eres, sino que alguien te aprecie por lo que eres, y te acepte y te ame incondicionalmente. Un verdadero amigo es aquél que llega cuando el resto del mundo se ha ido.
Instinto animal
Cuenta la leyenda que una vez una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga. Ésta huía rápido y con miedo de la feroz predadora,
y la serpiente, al mismo tiempo, no desistía.
Huyó un día y la serpiente la seguia; dos días y la seguía. Al tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y le dijo a la serpiente:
- ¿Puedo hacerte tres preguntas?
- No acostumbro a dar esta oportunidad a nadie, pero como te voy a devorar, puedes preguntar -respondió la serpiente-
- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
- No -dijo la serpiente-
- ¿Yo te hice algun mal?
- No -volvió a responder la serpiente-.
- Entonces... ¿por qué quieres acabar conmigo?
- Simplemente, porque no soporto verte brillar.
A veces te vas a encontrar con personas que van a tratar de quitarles el brillo. No se dejen opacar.
Aquel saco de plumas.
Había una vez un hombre que insulto granvemente a un amigo suyo, todo por la envidia que le tuvo al ver el éxito que este había alcanzado.
Tiempo después se arrepintió de la ruina que trajo con sus insultos a ese amigo, y visitó a un hombre muy sabio a quien le dijo: "Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo. ¿Cómo puedo hacerlo?", a lo que el hombre respondió: "Toma un saco lleno de plumas ligeras y pequeñas y suelta una donde vayas".
El hombre muy contento por aquello tan fácil tomó el saco lleno de plumas y al cabo de un día las había soltado todas.
Volvió donde el sabio y le dijo: "Ya he terminado", a lo que el sabio contestó: "Esa es la parte más fácil. Ahora debes volver a llenar el saco con las mismas plumas que soltaste. Sal a la calle y búscalas".
El hombre se sintió muy triste, pues sabía lo que eso significaba y no pudo juntar casi ninguna.
Al volver, el hombre sabio le dijo: "Así como no pudiste juntar de nuevo las plumas que volaron con el viento, así mismo el mal que hiciste voló de boca en boca y el daño ya está hecho. Lo único que puedes hacer es pedirle perdón a tu amigo, pues no hay forma de revertir lo que hiciste. Porque cometer errores es de humanos y de sabios pedir perdón."
Elecciones
Una mujer fue al médico con un verdadero catálogo de quejas por su salud. El médico la revisó minuciosamente, y se convenció que no tenía ninguna enfermedad. Simplemente, sospechó que se trataba de una perspectiva negativa de la vida: su resentimiento y amargura.
Entonces, el médico llevó a su paciente hasta otra habitación del consultorio donde guardaba las medicinas. Le mostró un mueble lleno de botellas vacías y le dijo:
- ¿Ve estas botellas? Observe que todas están vacías. Tienen distintas formas, aunque básicamente son iguales, sirven para lo mismo. Ahora bien: puedo tomar cualquiera de ellas y llenarla con veneno, como para matar a un ser humano. O puedo llenarlas con un remedio para quitar el dolor de cabeza, bajar la fiebre o quitar una infección. Lo importante es que yo tome la decisión. La elección siempre está en mi.
El doctor la miró a los ojos y le dijo:
- Cada día recibimos una botella vacía. Podemos llenarla de pensamientos que nos ayuden a afirmar los aspectos bellos de la vida y con actitudes positivas, o con ideas destructivas. La opción es nuestra.
En busca de la pareja perfecta
Habia una vez una muchacha de nombre Nadia, cuya belleza atraía a todos los que la conocían. A pesar de ello, Nadia se sentía muy sola. Tras la alegría del primer encuentro con sus pretendientes, les encontraba defectos. Entonces, sentía que su amor se marchitaba y seguía anhelando su ideal de pareja perfecta.
Un día, Nadia oyó hablar de un sabio que a todos conmovía con sus palabras. Aquella noche, decidió consultarle su problema.
"Tal vez -se decía- me pondrá en el camino de ese hombre ideal que sueño".
A la mañana siguiente, llegó hasta él y, tras exponerle su mala suerte, le dijo:
- Necesito hallar la pareja perfecta. ¿Qué podria decirme? Una persona como usted, sin duda, habrá encontrado la pareja perfecta.-
Aquel anciano, mirando a Nadia con brillo intenso en sus ojos, le dijo:
- Pasé mi juventud buscando a la mujer perfecta. En Egipto, encontré a una mujer bella e inteligente, pero era muy inconstante y egoísta. En Persia, conocí a una mujer que tenía un alma buena y generosa, pero no teníamos aficiones en común
Y así una mujer tras otra. Al principio, me parecía haber logrado "el gran encuentro", pero, pasado un tiempo, descubría que faltaba algo que mi alma anhelaba. Fueron transcurriendo los años hasta que de pronto, un día
- dijo el anciano haciendo una emocionada pausa, -la vi, resplandeciente y bella. ¡Allí estaba la mujer que yo había buscado toda mi vida!-
-¿Y qué pasó? ¿Te casaste con ella?- replicó entusiasmada la joven Nadia.
- Al final
la unión no pudo llevarse a cabo.
-¿Por qué?, ¿por qué?-
- Porque al parecer le dijo el anciano con un gran brillo en sus ojos, -ella buscaba la pareja perfecta
-
A veces nos concetramos tanto en que nuestra pareja sea perfecta que olvidamos de disfrutar el estar junto a esa persona, no se trata de buscar lo perfecto, se trata de aceptar los defectos y comprenderlos, ya que nosotros tampoco somos perfectos.
Las cuatro velas
Cuatro velas se estaban consumiendo lentamente.
El ambiente estaba tan silencioso que se podía oír el diálogo entre ellas.
La primera dijo:
- ¡Yo Soy la Paz! A pesar de mi Luz, las personas no consiguen mantenerme encendida.
Y disminuyendo su llama, se apagó totalmente.
La segunda dijo:
- ¡Yo me llamo Fe! Infelizmente soy inutil para las personas, porque ellas no quieren saber de Dios, o de un ser superior, por eso no tiene sentido continuar quemándome.
Al terminar sus palabras, un viento se abatió sobre ella, y esta se apagó.
En voz baja y triste la tercera vela se manifestó:
- ¡Yo Soy el Amor! No tengo mas fuerzas que quemar. Las personas me dejan de lado porque solo consiguen manifestarme para ellas mismas; se olvidan hasta de aquéllos que están a su alrededor.
Y también se apagó.
De repente entró una niña y vio las tres velas apagadas.
- ¿Qué es esto? Ustedes deben estar encendidas y consumirse hasta el final.
Entonces la cuarta vela, habló:
- No tengas miedo, niña, en cuanto yo esté encendida, podemos encender las otras velas.
Entonces la niña tomó aquella vela, la vela de la Esperanza, y encendió nuevamente las que estaban apagadas.
Bailar bajo la lluvia
Una mujer muy sabia se despertó una mañana, se miró al espejo y notó que tenía solamente tres cabellos en su cabeza. 'Hummm' pensó, 'creo que hoy me voy a hacer una trenza'. Así lo hizo y pasó un día maravilloso.
El siguiente día se despertó, se miró al espejo y vio que solamente tenía dos cabellos en su cabeza. 'Hummm' dijo 'creo que hoy me peinaré de raya en medio'. Así lo hizo y paso un día grandioso.
El siguiente día cuando despertó se miró al espejo y notó que solamente le quedaba un cabello en su cabeza. 'Bueno' ella dijo 'ahora me voy a hacer una cola de caballo'. Así lo hizo y tuvo un día muy, muy divertido.
A la mañana siguiente cuando despertó corrió al espejo y enseguida notó que no le quedaba ni un solo cabello en la cabeza. 'Que bien' exclamó 'hoy no voy a tener que peinarme'.
La actitud es todo.
La vida no es esperar a que la tormeta pase. Es aprender a bailar bajo lo lluvia.
Pinturas
Había una vez un Rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta.
Muchos artistas lo intentaron...
El rey observó y admiró todas las pinturas, pero solamente hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas.
La primera era un lago muy tranquilo. Este lago era un espejo perfecto donde se reflejaban unas plácidas montañas que lo rodeaban. Sobre éstas se encontraba un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos quienes miraron esta pintura pensaron que reflejaba la paz perfecta.
La segunda pintura también tenía montañas. Pero estas eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía un impetuoso aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua. Todo esto no se revelaba para nada pacífico. Pero cuando el Rey observó cuidadosamente, miró tras la cascada un delicado arbusto creciendo en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido. Allí, en medio de del rugir del la violenta caída de agua, estaba sentado plácidamente un pajarito en el medio de su nido... la paz perfecta.
Cuál creen que fue la pintura ganadora?
El Rey escogió la segunda. ¿Sabés porqué?
Porque," explicaba el Rey, "Paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. Paz significa que a pesar de estar en medio de todas estas cosas permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón. Este es el verdadero significado de la paz."
Una mañana extraordinaria
Aquella podría ser una mañana más como otra cualquiera. Un sujeto entra en la estación del Metro; va vestido con un pantalón de jean, una camiseta barata se sitúa cerca de la entrada... extrae un violín de la caja y comienza a tocar con entusiasmo para toda la gente que pasa por allí. Es la hora pico de la mañana.
Durante los 45 minutos que estuvo tocando el violín, fue prácticamente ignorado por todos los pasajeros del Metro.
Nadie sabía que ese músico, era, precisamente, Joshua Bell, uno de los mejores violinistas del mundo, ejecutando sin parar las piezas musicales más consagradas de la historia, con un instrumento muy especial, un violín Stradivarius, estimado en un valor de más de 3 millones de dólares.
Unos días antes, Bell, había tocado cpn la Sinfónica de Boston, donde los mejores lugares para el concierto costaban1000 dólarescada uno.
Esto, que ha sido grabada en video, muestra a hombres y mujeres que caminan muy rápido, cada uno haciendo una cosa, pero todos indiferentes al sonido del violín...
La iniciativa fue realizada por el Diario The Washington Post, con la finalidad de lanzar un debate sobre el valor del arte, y de su contexto.
Tiene 41 años de edad. Al retirarse de tocar en el metro tenía en su funda sobre el piso 32 dólares.
LA CONCLUSIÓN: Estamos acostumbrados a dar valor a las cosas cuando están en un determinado contexto. En este caso, Bell, era una obra de arte en sí mismo, pero fuera de contexto, pasaba desapercibido
Hay que aprender a valorar las cosas por lo que son, en cualquier lugar y momento de la vida. Abran los ojos.
Acalo pueden ver y escuchar:
link: http://www.youtube.com/watch?v=hnOPu0_YWhw
Somos lo que somos
Un rey fué hasta su jardín y descubrió que sus árboles, arbustos y flores se estaban muriendo:
El Roble le dijo que se moría porque no podía ser tan alto como el Pino.
Volviéndose al Pino, lo halló caído porque no podía dar uvas como la Vid.
La Vid se moría porque no podía florecer como la Rosa.
La Rosa lloraba por no ser fuerte y sólida como el Roble.
Entonces encontró una planta,un Clavel, floreciendo y más fresco que nunca. El rey le preguntó:
- ¿Cómo es que creces tan saludable en medio de este jardín mustio y sombrío'?
- Quizás sea porque siempre supuse que cuando me plantaste querías claveles. Si hubieras querido un Roble, lo habrías plantado. En aquel momento me dije: Intentaré ser un clavel de la mejor manera que pueda y heme aquí el más hermoso y bello clavel de tu jardín.
Vivimos marchitandonos nuestras propias existencias comparándonos con los demás.... si yo fuera, si yo tuviera, si mi vida fuera.... siempre conjugando el futuro incierto, en vez del presente concreto, empecinados en no querer ver, que la felicidad es un estado subjetivo y voluntario.
Podemos elegir hoy, estar felicies con lo que somos, con lo que tenemos o vivir amargados por lo que no tenemos o no podemos ser. Sólo podremos florecer el día que aceptemos que somos lo que somos, que somos únicos y que nadie puede hacer lo que nosotros vinimos a hacer.
MINUTOS DE SABIDURÍA
Un viejo cacique de una tribu estaba teniendo una charla acerca de la vida con sus nietos.
Les dijo: Una gran pelea está ocurriendo en mi interior y es entre dos lobos.
Uno de los lobos representa la maldad, el temor, la ira, la envidia, el dolor, el rencor, la avaricia, la arrogancia, la culpa, el resentimiento, la inferioridad, la mentira, el orgullo, la competencia, la superioridad y la egolatría.
El otro la bondad, la alegría, la paz, el amor, la esperanza, la serenidad, la humildad, la dulzura, la generosidad, la benevolencia, la amistad, la empatía, la verdad, la compasión y la fe.
Esta misma pelea está ocurriendo dentro de ustedes, y dentro de todos los seres de la tierra.
Lo pensaron por un minuto y uno de los niños le preguntó a su abuelo:
Abuelo, dime
¿Cuál de los lobos ganará?".
Y el viejo cacique respondió simplemente... EL QUE ALIMENTES.
Excusas
Se dice que muchos años atrás el Virrey de Nápoleshizo una visita a Barcelona, España. En el puerto había un barco de remos, una galera, con prisioneros condenados a remar, castigo usual para la época. El Virrey se acercó a los prisioneros y les preguntó que había pasado, que los había llevado a estar ahora en esta situación. Así escuchó de primera voz terribles historias.
El primer hombre dijo que estaba allí porque un juez aceptó un soborno de sus enemigos y lo condenó injustamente. El segundo dijo que sus enemigos habían pagado a falsos testigos para que lo acusaran. El tercero dijo que había sido traicionado por su mejor amigo, quien escapó de la justicia dejándolo. Y así por el estilo.
Finalmente el Virrey dio con un hombre que le dijo: mi Señor, yo estoy aquí porque lo merezco. Necesitaba dinero y le robé a una persona. Estoy aquí porque merezco estarlo.
El Virrey quedó absolutamente anonadado y volviendo sobre el capitán del navío de esclavos dijo: aquí tenemos a todos estos hombres que son inocentes, están aquí por injustas causas, y aquí este hombre malvado en medio de todos ellos. "Que lo liberen inmediatamente, temo que pueda infectar a los demás.
De esta manera el hombre que se había confesado culpable fue liberado y perdonado, mientras aquellos que continuaban excusándose a si mismos volvieron a los remos.
Esta es una historia verdadera, y la moraleja es bastante obvia. Hablamos de las excusas y su poder. De cómo nos encadenan y mantienen sujetos en un determinado orden de cosas.
Tratemos de no poner excusas, a veces es mejor hacernos cargo de las cosas y ser mas sinceros con uno mismo y con los demas.
Prueba de Valor
Un millonario promueve una fiesta en una de sus mansiones y, en determinado momento, pide que la música pare y dice, mirando hacia la piscina donde cría cocodrilos australianos:
Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles. ¿Algún voluntario?
Espantados, los invitados permanecen en silencio y el millonario insiste:
- Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles y mis aviones.¿Algún voluntario?
El silencio impera y una vez más el ofrece:
- Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles, mis aviones y mis mansiones.
En ese momento alguien salta a la piscina.
¡La escena es impresionante!
Una lucha intensa, el valiente se defiende como puede, les sujeta la boca a dos cocodrilos con los pies y las manos, tuerce la cola de los reptiles. Increíble. Mucha violencia y emoción. Parece una película!
Después de unos minutos de terror y pánico, sale el valiente hombre lleno de rasguños, hematomas y casi desnudo.
El millonario se le acerca para felicitarlo y le pregunta:
- ¿Dónde quiere que le entregue los automóviles?
- Gracias pero no quiero sus autos.
Sorprendido el millonario pregunta:
- ¿Y los aviones, dónde quiere que se los mande?
- Gracias, no quiero sus aviones.
Extrañado por la reacción del hombre, el millonario le pregunta:
- ¿Y las mansiones?
- Tengo una casa hermosa, no necesito las suyas. Se puede quedar con ellas.
- No quiero nada que sea suyo.
Impresionado el millonario le pregunta:
-¿Pero si usted no quiere nada de lo que ofrecí, que es lo que quiere?
El hombre muy irritado responde:
- ¡ENCONTRAR AL CRETINO QUE ME EMPUJÓ AL AGUA!
Moraleja:
Somos capaces de hacer cosas que a veces nosotros mismo no creemos que conseguiríamos, y a veces para lograrlo necesitamos de un pequeño empujoncito.
Fuente: http://taringa.net/posts/offtopic/6514544/Te-cuento-algo-cortito-2.html
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