Triste E3. Una cosa que me llamó la atención durante la conferencia de Microsoft fue que, al soltar el """bombazo""" de la retrocompatibilidad, papu Philly Spencer no dio detalles de como funcionaría exactamente, sino que se limitó a decir "wiiiii, a fin de año la tendremos wiiiii por lo pronto ahora estará en fase de prueba para nuestros monos entrenados usuarios consentidos wiiii miren miren ahí tienen MassEffect. Fin del comunicado".
Algunos medios reportaron que se dijo que los juegos correrían "nativamente". En lo personal, yo no recuerdo haber escuchado tal cosa. Lo que si recuerdo es que alcance a distinguir algo así como "progresivamente". Y bueno, eso sumado a tanta parquedad en el anuncio me provocó el escozor de la suspicacia y el sospechosismo. Y es que, desde aquel grosero E3 del 2013 con el bocasucia Mattrick, me cuesta mucho trabajo creer en Microsoft (vamos, como si fuera sano y cuerdo "confiar" en una corporación transnacional, para empezar). Además, laverdad laverdad, en estos tiempos de remasterizaciones y microtransas me parecía demasiado hermoso que todo fuera a ser tan sencillo como introducir cualquier disco de 360 en el One y que lo comenzara a reproducir con amor de hogar y sabor a sopa de estrellitas, letras, fideos - Mamá!! -
Pues bueno, como siempre no tardó mucho en salir el peine y destaparse la cloaca.
De acuerdo con la página oficial de Microsoft sobre el tópico, la retrocompatibilidad no será nativa. Los juegos compatibles se irán lanzando poco a poco y todos serán descargables. Si, incluyendo los que ya poseamos en disco. Al introducir el disco en el juanito, se iniciará la descarga del título correspondiente, siempre y cuando éste previamente se encuentre en la lista de juegos compatibles.
Entonces es evidente que la compatibilidad de cada juego requiere un trabajo de conversión, lo que necesariamente tendrá un costo, ya sea para Micro o para el estudio respectivo. Y aún cuando no le vaya a generar un gasto económico al consumidor, eso significará que, a la larga, no todos los juegos serán retrocompatibles. Nadie da los pesos a tostón, decía mi Abuela Lola.
Por tanto, por más que en la conferencia hayan mostrado como imagen de fondo un chingo de juegos de 360, nada ni nadie me garantiza que toda mi colección old gen será compatible. Y además, me queda el tufillo de que, como dijo Rodris ( ) en su artículo, es una medida momentánea para calmar a la perrada hambreada por la falta de lanzamientos. Y que por tanto, a la larga, finalmente será abandonada.
Conclusión personal: Anuncio engañabobos para atraer reflectores.
Ni pez, todo por servir se acaba y acaba por no servir. Como Nintendo.