Así es, amigos. Lamentablemente para mí, la vida de un pequeño amigo de plástico ha terminado.
Ayer domingo, a eso de las 14:30 horas, encendí mi Xbox 360 como normalmente lo hacía, pero después de haber pasado la animación de encendido y al estar iniciando mi sesión de Xbox Live, aparecieron las asquerosas luces rojas de la muerte. Con 10 años y 3 meses detrás de ella, mi preciada Xbox 360 versión Pro de la cual poseo más de 200 juegos, ha terminado su vida útil.
Titán de titanes, una consola impresionante que me dió horas, días, semanas, meses y años de incontable diversión. Será guardada para la posteridad.
Ahora estoy comenzando a ahorrar para comprar una nueva Xbox 360 versión Xbox One, con la cual ya tendré un disco duro interno decente que se unirá con el disco duro externo que ya poseía, Wi-Fi y HDMI, en cuanto la pueda comprar, la compartiré con ustedes.
Saludos, y sorry por el spam.