Hubo un momento en que GameStop era uno de los minoristas de videojuegos más poderosos del mundo. Sin embargo, a medida que la industria avanza hacia el futuro digital, la compañía pierde cada vez más terreno. Después de anunciar sus resultados del primer trimestre de 2019, sus acciones cayeron dramáticamente.
Hace un par de días, GameStop presentó su primer reporte de resultados de 2019 (vía GamesIndustry.biz). En él, se mencionó una caída de 13.3% en ganancias y una generación de $6.8 MDD de ganancias netas, mucho menos que los $28.2 MDD generados en el mismo periodo de 2018. Tras estas decepcionantes cifras, las acciones de la corporación bajaron hasta 39% este jueves. En este momento, una acción vale $5.13 USD, algo muy lejano de los casi $8 USD que valía el pasado jueves, de acuerdo con Yahoo Finance:
Con esta meteórica caída, este es uno de los peores días en la historia de GameStop desde que empezó a cotizar en la bolsa en 2002, antes de que se separara de Barnes & Noble y adquiriera a su rival Electronics Boutique:
¿Y a qué se debe este mal primer trimestre de 2019? Según analistas (vía CNBC), el gran catalizador es el avance de los consumidores hacia una industria digital y de streaming que no necesita de minoristas. Otra razón es que, en este momento, las consolas de videojuegos actuales se encuentran cerca de el final de su ciclo de vida. Así, los gamers ya no quieren comprar consolas, pues prefieren esperar por el PlayStation 5 y el próximo Xbox. De hecho, las ventas de hardware de GameStop cayeron 35%. Solo el Nintendo Switch vendió más unidades por ser relativamente nuevo. Por el momento, la única parte del negocio de GameStop que mejoró fue la de los artículos coleccionables, pues tuvo un aumento de 10.5% respecto a 2018.
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