Las organizaciones no gubernamentales dedicadas al análisis del sector fiscal han sido un apoyo importante para que los ciudadanos y gobiernos tengan conocimiento de lo que sucede en materia de impuestos más allá de los reportes oficiales. En el caso de Reino Unido, el think tank, TaxWatch UK, ha hecho pública información en torno a las prácticas de compañías relacionadas con el sector de los videojuegos que les permiten eludir sus obligaciones fiscales y recientemente se reveló la forma en que operan Rocksteady y Creative Assembly.
El nuevo reporte de la organización TaxWatch UK en torno a las prácticas de las compañías de videojuegos en su relación con el fisco de Reino Unido reveló los casos de Rocksteady, responsables de la serie Batman: Arkham y que están relacionados con Warner Bros. Interactive, así como de Creative Assembly, estudio vinculado con SEGA, a partir de la política fiscal Video Game Tax (VGTR), que ofrece incentivos a las compañías. De inicio, el caso de Rocksteady refiere la situación del estudio ante las autoridades fiscales de Reino Unido señalando un aprovechamiento inadecuado del programa VGTR, lo cual le permite obtener créditos fiscales para no solo pagar impuestos, sino cubrir costos de producción. En específico, TaxWatch UK señaló que Rocksteady transfiere parte de sus ingresos a Warner Bros. Interactive, lo que resultó de 2014 a 2017 en registros de pérdidas constantes pese al éxito que han tenido los juegos de Batman: Arkham en Reino Unido, lo cual deja al estudio como una empresa con pérdidas que puede aprovechar el apoyo de VGTR y esto le permite no pagar impuestos por concepto de sociedades.
Por otra parte, la relación entre SEGA y Creative Assembly también dio de qué hablar en el reporte de TaxWatch UK, pues la organización señaló que la compañía japonesa, pese a asegurar que no participa en esquemas de evasión fiscal, logró evitar el pago de impuestos por sociedades a través del estudio, lo cual impactó de forma positiva su registro de ganancias. Al respecto, el éxito de Creative Assembly para aplicar ante el programa VGTR permitió que SEGA no se hiciera responsable de sus obligaciones fiscales y que los créditos otorgados fueran directo a su contabilidad en materia de ganancias.
Finalmente, TaxWatch UK insistió en los errores y lagunas legales que existen en los programas de apoyo fiscal relacionados con la industria de los videojuegos en Reino Unido, pues estudios y compañías exitosos y con modelos de negocio muy lucrativos, han sabido aprovechar los incentivos a su favor para no pagar impuestos. En ese sentido, cabe recordar que el think tank ha señalado prácticas como las de Rockstar Games e incluso las de Activision que involucran triangulaciones a través de paraísos fiscales.
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