En 2014, Nintendo y Koei Tecmo tomaron la fórmula de Dynasty Warriors y la pusieron en una licuadora con los elementos que hacen grande a The Legend of Zelda. ¿El resultado? Una refrescante fusión de 2 productos que provocaron el nacimiento de Hyrule Warriors que, hasta el momento, es uno de los títulos más entretenidos que puedes encontrar en Wii U. La acción y los gráficos de esta propuesta enamoraron a un público que quería un juego de acción desenfrenada con The Legend of Zelda como escenario.

Ahora, ¿es posible trasladar este paquete a una portátil manteniendo la calidad de la presentación y el característico gameplay? La idea suena a una misión imposible porque hablamos de un sistema que ya va para su 5º año. Sin embargo, Hyrule Warriors Legends no es un port innecesario o un juego para llegar a una base instalada más grande; es una entrega completa que te llevará, una vez más, por el hermoso Hyrule.

Lo primero que debes saber es que todos los elementos de la entrega original están también en Legends. Sin importar que juegues en un 3DS convencional o en el modelo más reciente, notarás que no hay problema cuando atacas o te desplazas en el escenario. El género Dynasty Warriors es tan sencillo que podría caber hasta en un teléfono, así que, al menos en el apartado del gameplay, no encontré alguna deficiencia. Los problemas se presentaron en el rendimiento: desde el movimiento de la cámara hasta el uso del efecto estereoscópico. El 3DS no es capaz de generar tantos enemigos en pantalla, así que cuando acabes con una horda de unos 25 o 30 goblins verás aparecer a otros 30 por obra de magia. Del lado de la cámara, el problema se nota más: cuando estás acorralado quedas muy cerca de la cámara y se hace una especie de toma en primera persona que no puedes quitar. Ahora, ¿esto es un verdadero problema que te impida disfrutar Hyrule Warriors Legends? Creo que no, más cuando ya sabes que estás jugando en una portátil y entiendes cuáles son sus fortalezas y debilidades.

Debo de admitir que la presentación gráfica, en general, cumple, pero a Hyrule Warriors Legends le pasa lo mismo que a la versión de 3DS de Super Smash Bros. El contorno de los personajes tiene una moderada línea negra que los hace ver menos atractivos que en la versión de consola. Por otro lado, durante una cinemática notarás que no hay pérdida en la calidad y que la pantalla del 3DS es digna para disfrutar los dramáticos momentos de este título. Algo que no debes perder de vista es que, aunque Hyrule Warriors Legends sea compatible con todos los sistemas de la familia 3DS, sólo en el nuevo se ve superior, así que no esperes la mejor presentación cuando estés en un 2DS o en un 3DS convencional.

Lo que de plano no pude soportar fue el sonido. Hyrule Warriors en Wii U tenía una banda sonora majestuosa y de la mejor calidad. Los arreglos de los temas que ya conocías y la composición de los creados para esta entrega eran una delicia para tus oídos. Por desgracia, el 3DS nada más no puede con este apartado, y menos aún con la finura de la música del juego. Escucharlo con audífonos ayuda, pero no lo suficiente. Un elemento así de grande no cabe en 2 pequeñas bocinas estéreo. Imposible.

Algo que me gustó de Hyrule Warriors Legends es que el contenido de la entrega original está intacto y que tiene un poco más. Todo fue pensado tanto para los que ya tenían el juego en el Wii U como para los que apenas lo adoptaron en el 3DS. Hyrule Warriors Legends incluye un código para descargar un tema en la portátil y contenido por defecto que la versión de Wii U no tiene. Si posees ambas, lo que viene en la edición portátil también lo tendrás en la versión de consola. Genial, ¿no crees?

Hasta el momento, todo lo que te he contado respecto a Hyrule Warriors Legends detalla una experiencia redonda, entera, correcta; sin embargo, el juego es grande y cansado. Hay partidas que pueden durar entre 25 y 50 minutos, lo cual está bien cuando se vive desde un sillón y en una enorme pantalla, pero cansa si tienes que cargar la consola mientras juegas y probablemente prefieras suspender la partida. Sin embargo, esto va a la perfección con Hyrule Warriors porque salvas el juego cuando quieres y lo abandonas un rato para desconectarte y pensar cómo afrontar tu estrategia y luego continúas. Dependerá de ti cómo encarar el reto de superar este título que dura un poco más que la edición de Wii U porque viene con todo el DLC que había salido y un poco más.

Algunos de los ajustes más notables en Hyrule Warriors Legends, si ya lo jugaste en Wii U, es que puedes cambiar entre personajes durante la partida de una manera muy ágil: sólo debes presionar la pantalla táctil. Así que justo cuando un personaje necesite ayuda porque le están dando una tunda, sólo debes elegirlo y tomar cartas en el asunto.

Un detalle especial es que ahora Legends parece más un Dynasty Warriors porque hay que cumplir pequeñas misiones que van desde defender un punto hasta acabar con pequeños jefes y terminar con un escenario en determinado tiempo. Esto hace que disfrutes tanto a Link como a los demás protagonistas, como Linkel, la versión femenina del héroe de Hyrule que durante mucho tiempo los fans exigieron a Nintendo. Me gustó mucho jugar con ella, disfruté cada nivel donde podía seleccionarla debido a que su estilo de juego es muy distinto al de los demás. Su uso de ballestas es muy especial y, en algunos momentos, siento que hasta hace tributo a Bayonetta, en especial, cuando camina hacia delante y dispara al frente; sólo faltaba que se contoneara, pero digamos que Linkel aún es joven y no tiene el cuerpo de la bruja de Umbra.

Hyrule Warriors Legends tiene mucho contenido para disfrutar.

Algo que notarás es que en un inicio el título no es tan complicado, pero la dificultad crece de golpe y por eso cada nivel puede durar hasta 50 minutos. Es indispensable que decidas la estrategia de administración que seguirás, pues no puedes descuidar lo que hagan los demás personajes porque necesitan tus órdenes para encarar al ejército en turno. Es importante que pongas atención a todos los mensajes: si te están diciendo que una base está por caer, es que eso va a pasar y si de plano no puedes regresar, piensa que puedes dar la orden a uno de tus aliados para que vaya y arregle las cosas.

Igual que otros juegos de Dinasty Warriors, Hyrule Warriors Legends es muy repetitivo. Aunque el escenario es el adecuado para aprovechar este género, la realidad es otra. Es divertido acabar con centenares de enemigos, pero cuando ofrecen poca resistencia, el hábito se vuelve más una obligación que algo con lo que valga la pena cumplir. Por otra parte, hay ocasiones en que el juego es un poco injusto, pues tus compañeros de batalla tampoco son los seres más hábiles y eso incluye a Impa y Sheik. Por ejemplo, justo cuando gastaste más de media hora de tu vida en superar un calabozo a tus poderosas compañeras se les ocurre huir por no poder con la carga y eso da por terminada la partida. Lo primero que te preguntarás es si hiciste algo mal o debes algo a una entidad divina por esta pérdida de tiempo.

Finalmente, quiero hacer una sugerencia: por ningún motivo juegues con el 3D. ¿Por qué lo digo si es la principal característica de la portátil de Nintendo? Sencillo: el frame rate del juego desciende considerablemente y la experiencia se va al demonio. Los efectos 3D no tienen caso, ni en las animaciones.

Hay que dejar en claro que éste dista de ser el mejor juego con The Legend of Zelda como escenario, sin embargo, es entretenido, retador y cumple cabalmente con todo lo que un título con las características de Dynasty Warriors puede ofrecer. Es una entrega que se siente bien, aunque puede ser cansado jugar desde el 3DS. La calidad visual varía en cada portátil y el sonido no es su fuerte. Legends vale la pena por todo el contenido y porque puedes transferir a los personajes de la edición portátil a la de consola; una buena opción para los que querían algo más de The Legend of Zelda y terminaron decepcionados de Tri Force Heroes.