Kyn es la obra del desarrollador independiente Tangrin Entertainment; se trata de una entrega ambientada en el folclor y los mitos de la cultura de nórdica, donde explorarás diferentes zonas cumpliendo objetivos y solucionando problemas de la historia. La particularidad es que el combate tiene carácter estratégico, muy similar a algunos RPG como Baldur's Gate, Dragon Age y Pillars of Eternity pero también cuenta con elementos de acción similares a los de Diablo III. Sin embargo, en Kyn destaca el concepto de la progresión de los personajes, porque no se limitan a un arquetipo, es decir, pueden crecer y desarrollarse libremente gracias a un sistema de atributos para utilizar diferentes armamentos y habilidades.

Eres un sobreviviente de un ritual ancestral que los aspirantes a guerreros Magni deben superar. La aventura te llevará a explorar y defender Vinborg, un pueblo nórdico de una amenaza relacionada con los Aeshir. Vinborg está diseñado como un hub para dirigirte a otras misiones y sobresale su gran tamaño: cuenta con establos, templos, espacios para habitación y plazas, el problema es que está vacío, completamente vacío. No hay incentivos para explorarlo y todo lo que necesitas para tu aventura está en la plaza central. Vinborg es una escala necesaria en la progresión del juego; es decir, antes de embarcarte en tu siguiente aventura la historia siempre te lleva arbitrariamente al pueblo, ya que es imposible seleccionar la siguiente locación porque el progreso es lineal.

El combate tiene carácter estratégico

Uno de los grandes aciertos de Kyn, ausente en juegos de los géneros que copia, es que los personajes pueden especializarse como decidas, a través de un sistema de 3 atributos que asignas libremente y que se relacionan entre sí: Mind, Body y Control. Incrementar los puntos en cualquiera de las 3 categorías mejora el desempeño de los personajes en el área que quieras especializarlos. Por ejemplo, para crear a un buen guerrero necesitas invertir puntos de habilidad en Body y Control porque Body incrementa la salud y el daño que puede infligir el personaje, mientras que Control aporta velocidad de ataque. Así, el guerrero destaca como uno que empuña un hacha de 2 manos y usa habilidades devastadoras.

Incrementar el valor de los atributos de los personajes también les permite usar habilidades cada vez más poderosas y especializadas. Por ejemplo, puedes equipar a tu guerrero con un escudo para defender a sus aliados y con Reinforced Shield, para reducir el daño que recibe; en otra instancia, Shield Bash sirve para aturdir a los oponentes. También hay Feedskills, que son habilidades más poderosas que las comunes y necesitan un cristal para determinar su funcionamiento. Los cristales requeridos vienen en diferentes sabores y tamaños para aderezar la variedad de herramientas con las cuales superar los retos.

Carece de identidad

A pesar de que el sistema presenta algunas innovaciones en el género, su ejecución es problemática. Me gustó la variedad de las habilidades y cuando leí las más poderosas, aún sin desbloquear, no pude evitar pensar en combinaciones épicas para explotar el poder de mi personaje; el problema es que cada uno está limitado a 2 habilidades y 1 Lifeskill. Lo anterior te confina a usar las habilidades más eficientes, pero por fortuna, puedes utilizar hasta 6 aventureros para compensar la falta habilidades y dar variedad a la experiencia. Estas restricciones te obligan a destinar a varios personajes un atributo específico, lo cual es un claro ejemplo de cómo agregar complejidad innecesaria de un elemento sencillo.

Uno de los mayores problemas de Kyn es que carece de identidad, es decir, toma conceptos de muchas franquicias y los implementa sin éxito. El resultado es un juego donde el énfasis es la destrucción de monstruos y adquisición de loot, como en Diablo, pero también pretende ser de combate estratégico similar a Pillars of Eternity, Dragon Age y Baldur's Gate. El problema de lo anterior es que la ejecución de cada idea es mediocre porque está hecha a medias.

Para ejemplificar esto me referiré al combate, que por desgracia, sufre por el trabajo de programación. Dentro del juego es muy común perder la noción de los puntos de vida de los personajes y enemigos por la aparición de letreros de loot que cubren gran parte del campo de batalla; así perdí muchos enfrentamientos porque el centro de la pantalla no muestra la información crítica en su momento. En otras instancias hay falta de precisión en los hitboxes de los personajes: sucede que es muy fácil asignar un comando de movimiento cuando lo que quieres en realidad es hacer clic a un enemigo para atacarlo; eso desorganiza la formación del grupo de personajes y acabó con mi aventura en numerosas ocasiones.

La presentación de Kyn también tiene irregularidades, lo que pone en evidencia la escasa calidad y la falta de control en la programación. El juego es de una vista superior casi isométrica, así que puedes controlar la cámara para hacer zoom a la acción y, en teoría, planear mejor tu estrategia; el problema es que en ocasiones el terreno ―digamos un árbol mal diseñado o una torre― bloquea lo que ves en pantalla y a veces el mismo diseño de los mapas perjudica la experiencia. Cabe aclarar que es posible rotar la cámara para tener más control sobre el escenario, pero esta opción se ubica detrás de un menú y cuando la activas, el juego te advierte que se trata de una característica en fase prueba que puede presentar más problemas. Aquí es importante recordar que el juego que acaba de salir de Early Access y fue liberado de forma oficial, así que debería tener más calidad. No dudo de que el desarrollador pula algunos problemas que plagan a Kyn, sin embargo, no se podrán hacer maravillas con los errores de diseño.

Lamentablemente, el combate dista de ser estratégico por la magnitud de problemas que te comenté. Superar los enfrentamientos resulta una tirada de dados más que un reto. El loot cubre la pantalla y en ocasiones, la acción en combate es caótica porque los personajes se amontonan o se quedan de pie observando al paisaje y cómo sus aliados caen en glorioso combate. Kyn es una mezcla sin pies ni cabeza con elementos torpes que funcionan mejor en otros juegos.