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Xbox arrancó el año de la mejor manera posible: con el anuncio de una nueva franquicia. De la mano de Tango Gameworks y Bethesda, Hi-Fi RUSH llamó la atención por su trailer atractivo y colorido, y por la noticia de que llegó el mismo día de su presentación.
Este título de acción y ritmo es muy diferente a lo que la compañía estaba acostumbrada a desarrollar, pero eso no significa que sea un experimento poco pulido, sino todo lo contrario. Toma a la perfección elementos de otros títulos de los que se inspira y los desarrolla tan bien que termina por darnos algo mejor.
VIDEO: Hi-Fi RUSH - ¡Lo Bueno, lo Malo, lo Meh!
A veces, lo que brilla es más que oro
A pesar de que no tiene gráficos hiperrealistas, el estilo artístico de Hi-Fi RUSH es sublime. A los pocos segundos de verlo en el Xbox Developer Direct, nos recordó a Sunset Overdrive, uno de los juegos más infravalorados del Xbox One y a otros como Jet Set Radio, Code Name S.T.E.A.M. y hasta Into The Spider-Verse, gracias a su estilo de tira cómica pero que también se ve moderno.
Por lo mismo, el mundo es sumamente colorido y está lleno de vida. Dejar de lado el estilo realista para ir por uno mucho más caricaturesco dio como resultado que sea muy divertido explorar y recorrer los escenarios, y constantemente nos mantuvo muy atentos a los detalles y a todo lo que sucede.
La historia se desarrolla en una sociedad futurista y cyberpunk, así que lo natural hubiera sido elegir paletas de colores neón, gris y fríos, pero la decisión de que se asemejara más a una historieta o caricatura hace que resalte el mundo de Vandelay. Estas características lo diferencian de muchos títulos con esa temática y que en los últimos años se han puesto muy de moda.
El mejor cocktail del bar
Hi-Fi RUSH es un juego de acción y aventura de corte hack and slash que añade elementos de ritmo, lo que hace un experimento único e interesante. Su mundo es el patio de recreo perfecto para que todo ocurra, pues su diseño permite que todos los detalles brillen y se usen de manera excelente.
La exploración carece de complejidad o profundidad, pero siempre te recompensa de una manera justa y satisfactoria. La mayoría de los niveles son lineales, pero constantemente hay pasillos un poco escondidos que llevan a un cofre o un coleccionable que sirven para mejorar la salud, la energía o los movimientos. La aventura cumple casi a la perfección porque te mete de lleno en su mundo.
El combate y el ritmo van muy de la mano, pues hay que golpear y moverse al compás de temas musicales para aprovechar al máximo los movimientos y acertar combos poderosos. Es muy sencillo mantenerse en sintonía, porque hay varios indicadores para seguir el tiempo: desde una barra que se puede activar o desactivar hasta los objetos que se mueven con la música, como los enemigos en New Super Mario Bros.
Entre eso y que las canciones son muy pegajosas y sencillas, cualquier persona, sin importar si tiene experiencia en este tipo de entregas, puede mantener el ritmo y aprender nuevas acciones y comandos. El juego no te castiga brutalmente por perder la coordinación, así que no te preocupes si tienes el oído musical de una piedra.
A pesar de que se puede progresar sin mantener el ritmo, Hi-Fi RUSH te recompensa mucho si lo haces. Después de cada combate recibes una calificación que toma en cuenta el tiempo que tardaste, las notas que acertaste y los puntos de tus combos con un ranking que va desde la D hasta la S; si tu ranking es mejor obtienes más dinero, lo que es de muchísima importancia.
En constante movimiento
En los niveles hay engranajes que son la moneda de cambio para comprar en la tienda. Hay movimientos, ataques especiales, objetos y chips que son extremadamente útiles para incrementar tu repertorio y mantener fresco el combate. Hay muchísimas cosas a la venta, así que el arsenal a disposición es enorme y nunca dejas de aprender trucos nuevos y muy útiles.
Al inicio, solamente tienes el ataque ligero y el fuerte, pero la variedad de combos que dan es considerable. Después aprendes el ataque especial, que es mucho más poderoso y se activa con energía que ganas al acertar combos. Más adelante, los personajes que se unen a tu equipo también aportan movimientos que activas con el gatillo, y al poco tiempo desbloqueas el parry y los contraataques.
Además de lo que puedes hacer y aprender en combate, el título también introduce constantemente nuevas mecánicas para que la progresión de los escenarios sea diferente y sorpresiva. Incluso hay secciones que pasan de ser con movimiento libre a ser de derecha a izquierda, como en Kirby 64; como estas ideas hay muchísimas que todo el tiempo me hicieron decir en voz alta “¡wow!”
Como puedes ver, Hi-Fi RUSH le dio mucha importancia al combate, pues además de ser muy divertido gracias a que tienes que combinarlo con ritmo, lo hizo más abierto y profundo, y sin importar que lleves 10 horas de juego, siempre hay un combo o ataque especial nuevo. Esto hace que nunca te cases con un solo estilo de combate, y que siempre experimentes y descubras algo fascinante.
Una maquinaria muy completa
Los chips que mencioné sirven para mejorar a Chai. Por ejemplo, para recargar más rápido el tiempo de espera para que un compañero entre a ayudar o para tener más vida al agarrar un kit de salud. Para conseguirlos, además de dinero, hay que recoger partes de estos chips y tener las ranuras suficientes para equipar el mayor número.
En los escenarios también hay partes de contenedores de salud y de energía que funcionan como los de Legend of Zelda. Al conseguir el número requerido, aumentan estos indicadores en Chai, y son de mucha ayuda conforme avanzas y enfrentas retos mayores. Si no eres de los que exploran hasta el rincón más pequeño de un mapa, no te preocupes, porque también puedes comprarlos en la tienda.
Todo lo que puedes encontrar, comprar y mejorar en Chai hacen de Hi-Fi RUSH una mina de oro en cuanto a exploración, secretos, farmeo y descubrimientos, así que nunca se vuelve monótono o aburrido; siempre hay algo divertido que hacer. Incluso cuando pasas la historia por primera vez, el postjuego avienta nuevos objetivos que alargan la aventura para bien.
El Dream Team
Para cerrar lo positivo, están Chai y su equipo. A pesar de que la historia es sencilla y similar en otros productos, el cast tan carismático, entretenido, diferente y gracioso la hace brillar. El protagonista es un soñador que quiere ser una estrella de rock, a pesar de que no sabe tocar un instrumento; su pasión es la música y busca cumplir su meta.
Chai entra en el programa Armstrong de la compañía Vandelay, así que remplazan su brazo por uno robótico que le da mucha fuerza y le permite hacer todo tipo de maniobras. Durante esta operación, por error introducen su MP3 en su pecho y por eso puede sentir el ritmo a su alrededor, y se vuelve todo un músico.
El joven descubre las intenciones macabras de la compañía para controlar la mente de sus usuarios, así que busca detenerlos. En los siguientes niveles conoces a otros personajes que tienen el mismo objetivo, como Peppermint, su gato 808, Macaron y al robot CNMN, con quienes sumas fuerzas para avanzar y ser más fuerte.
Estos protagonistas son geniales y aportan mucho al desarrollo de la historia porque tienen personalidades diferentes que se complementan y los convierte en un gran equipo. Además, el humor y tono de las interacciones es blanco e inocente, sin ser infantil o soso, así que las interacciones son muy graciosas y genuinas.
En muchas series, películas o videojuegos los buenos son muy interesantes y están bien escritos mientras que los villanos se sienten más planos o aburridos, pero en Hi-Fi RUSH es todo lo contrario, pues Kale, el líder de Vandelay y el resto de los jefes son muy carismáticos, y aunque falta un poco de profundidad en sus intenciones, sus diálogos y personalidades son únicos.
Por último, el doblaje. Jugué muchos niveles con las voces originales y me parecieron sobresalientes, pero los latinos me sorprendieron mucho. Recomiendo a los actores estadounidenses porque agregan un poco más de carisma a sus personajes, pero si prefieres el latinoamericano, te aseguro que quedarás satisfecho con su trabajo.
Como disco rayado
Aunque disfruté muchísimo Hi-Fi RUSH, tiene defectos, pero realmente no arruinan la experiencia. Lo primero son los tutoriales repetitivos que siguen apareciendo varias horas después de haber comenzado el juego. Hay de 2 tipos: los de tu voz interior (o sea, una bocina) que te enseña cosas y los que propone un refrigerador Vandelay.
El primero es muy útil y hasta único, porque es arriba de un escenario con un público que corea tu nombre y te alienta. El segundo aparece siempre que adquieres una nueva habilidad o golpe, pero el problema es que dice cómo usarlos, al poco tiempo lo repite y da la opción de practicarlo. Lo molesto es tener que leer lo que acaban de mostrar.
Esto se replica mucho en las primeras horas de juego y hasta el mismo Chai confiesa que es muy intrusivo que el refrigerador hable de algo que ya escuchaste. Mata un poco el ritmo acelerado y desenfrenado de Hi-Fi RUSH, pero afortunadamente desaparece después de un tiempo.
A pesar de que la mayoría de los personajes son increíbles y tienen algo interesante que decir, los NPC se quedan atrás porque la variedad de robots para platicar es muy inferior y a veces dicen cosas que aportan poco. Hay como 5 tipos de máquinas, poco para un mundo tan amplio, colorido y sorprendente; llega un punto en que seguramente preferirás ignorarlos que detenerte a platicar con ellos.
Esto es una lástima porque tienen mucho potencial, sobre todo si piensas que el cast principal es tan diferente y gracioso; simplemente pienso que Tango Gameworks pudo hacerlo mejor. Eso sí, hay una sorpresa para los fans de The Evil Within y que está relacionada con unos NPC que destacan muchísimo.
¡Otra, otra, otra, otra!
La variedad de enemigos, aunque es mejor que la de los NPC, deja un poco que desear porque muchos se repiten. Se entiende porque Hi-Fi RUSH incrementa la dificultad con minijefes y otros contrincantes mucho más poderosos que los robots básicos, además de que los jefes son más complicados y únicos, pero aparecen pocas veces.
Los enemigos base siempre son los mismos, y así como con los NPC, es muy evidente porque el resto de personajes son muy interesantes y variados. Además, el título puede durar entre 15 y 25 horas (en caso de que quieras desbloquear todo), así que después de un rato deseas que hubiera más robots para despedazar al ritmo de The Black Keys, Nine Inch Nails y The Prodigy.
Por último, el endgame ofrece nuevos retos para sacarle jugo a Hi-Fi RUSH. Casi todo el contenido es atractivo, pero tiene un problema. Cuando derrotas al jefe final en la aventura principal ves unas puertas cerradas llamadas SPECTRA. En el endgame se abren y puedes entrar para cumplir retos con condiciones especiales que otorgan recompensas jugosas (algo así como los de la saga de Bayonetta). El problema está en que debes rejugar el nivel original y buscar estos cuartos para completarlos, y muchas veces están casi al final de los escenarios y puedes tardar entre media hora y una hora en encontrarlos.
Esto hace que te preguntes si de verdad quieres usar tanto tiempo para ir a esas habitaciones y completar los retos en menos de 5 minutos. Sería mejor ir directamente a las puertas; por otro lado, si eres de los que completa los juegos 100%, es una oportunidad para recoger todos los coleccionables que dejaste pasar en tu primera partida.
Veredicto
En conclusión, Hi-Fi RUSH fue una sorpresa fantástica en el Developer_Direct por su anuncio y salida tan repentina, y sorprende aún más el trabajo inmenso y excelente que hizo Tango Gameworks para regalarnos una nueva franquicia que, aunque se recarga mucho en sus inspiraciones, constantemente lanza elementos que lo hacen unos de los hack n’ slash más divertidos, entretenidos y envolventes que he jugado.
Honestamente, hace tantas cosas tan bien, que es fácil dejar pasar de lado sus defectos, y que seguramente arreglarán en una secuela.
Gracias a un combate adictivo, un cast memorable, un mundo lleno de vida, un soundtrack maravilloso y horas de contenido de muchísima calidad, Hi-Fi RUSH es un título obligado para todos los usuarios de Xbox, sin importar que jamás se hayan adentrado en los juegos de ritmo o los hack n’ slash. Su profundidad y variedad son detalles que enamorarán a más de uno que seguramente querrá seguir jugando por horas.
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